Despues de años observando a los osos polares en su habitat, estudiando su comportamiento e intentando entender su compleja forma de ser, Sigmund por fin pudo entregar su informe a la Comision Interestatal Encargada Del Estudio Y La Adoracion De Nuestros Amigos Los Osos Polares, o CIEDEYLADNALOP, para abreviar.
Volvio pues Sigmund del artico, delgado, con la barba mas larga y mas blanca y los pies mas frios. Cargaba con un maletin, en cuyo interior se encontraba la tesis que le habia ocupado los ocho ultimos años de su vida.
Entro con aire triunfal en la sala enmoquetada, donde lo esperaban los miembros mas ilustres de la Comision, y con aires de grandeza apoyo pesadamente el maletin en la mesa de caoba, en el centro de la habitacion.
Sin soltar palabra, saco con veneracion el tocho de casi quinientas paginas y lo deslizo en direccion a la silla presidencial.
Los alli presentes se removieron en sus sillas, inquietos y expectantes. El señor Poudmore, miembro fundador mas longevo, abrio con cuidado la obra del investigador, y finalmente pudo distinguir a traves de sus gafas una sola frase, en la ultima pagina del libro casi en blanco.
"Los Osos Polares no comen miel; los Osos Polares comen polos de miel, de ahi su nombre"
El resto es historia. La sala entera prorrumpio en aplausos, Sigmund entro en el selecto circulo de miembros de honor, y su tesis se coloco en el estante, en sitio privilegiado, para futuras consultas